domingo, 19 de mayo de 2013

La administración del hambre en tiempos de la biopolítica.


La administración del hambre en tiempos de la biopolítica.

PRIMERAS CONSIDERACIONES

El hambre se ha constituido como un elemento esencial a la hora de pensar la historia de la humanidad, incluso podríamos afirmar que gran parte de los conflictos que han azolado al mundo deben su origen a esta problemática. La sensación del hambre indica en forma directa su saciedad por medio de los alimentos, de ahí la estrecha relación entre falta y satisfacción. Tal binomio se ha configurado a partir de profundos desequilibrios y desigualdades. Según los estudiosos del problema históricamente en la falta ha recaído el protagonismo principal. Si bien, no es posible cuantificar o cualificar la experiencia del hambre, las estadísticas de los organismos que estudian tal fenómeno, hablan de alrededor de 24. 000 personas que fallecen cada día por causa de este flagelo, la mayoría niños de menos de 5 años. Por otra parte, la FAO indica que cerca de 800 millones de personas padecen de hambre en el mundo. Cifras que aumentan progresivamente debido a la actual crisis de alimentos que sufre el planeta. A partir de estos datos, podríamos pensar que el hambre remite solamente a un problema fisiológico y económico, que tendría solución a partir de la implementación de políticas adecuadas en este orden. Pero al parecer, el problema del hambre implica una infinidad de elementos que subyacen en otras esferas del desarrollo del propio ser humano, y guardan estrecha relación con la seguridad, la política, la cultura, etc.